El arte de ser pequeño

En primer lugar me gustaría plantear una pregunta, ¿Qué es ser pequeño?

Creo que la respuesta está muy relacionada con la asignatura de plástica, ya que ser pequeño para mí significa creatividad, imaginación, ilusión, ganas, entusiasmo, y todas esas palabras están relacionadas con plástica.

La clase del otro día en la que teníamos que ponernos en la piel de alguien que no habíamos sido nunca, o disfrazarnos interiormente de alguien o algo que no somos, o de alguien a quién admirábamos me hizo reflexionar sobre la asignatura. El aula se llenó de emociones, no solo físicas ya que más de uno soltamos alguna lagrima con las historias que nos contaban, sino emociones internas que nos hicieron ver de una manera diferente a la gente que se subió a la tarima, nos hizo escucharles con otros oídos y sacar nuestra capacidad más empática hacia ellos. Muchas veces faltan más clases de conocimiento personal y grupo y menos de conocimientos teóricos y materia, por lo que creo que la clase del otro día no solo hizo que nos planteáramos cosas en las horas que duraba la asignatura, sino que cada uno saliéramos de allí con una sensación diferente y la cabeza llena de ideas.

Los niños están llenos de arte, entendiendo como arte el crear una autentica historia de una simple duda que les surge, o regalar una sonrisa a cualquier desconocido por la calle, o disfrutar de un palo tirado en cualquier parque a cualquier hora. A veces nos falta ser un poco más niños en nuestra vida diaria, ya sea a la hora de regalar una sonrisa un lunes a las 8 de la mañana a cualquier desconocido, o saludar en cualquier autobús de cualquier ciudad, o incluso arte a la hora de preguntarnos por qué razón los pájaros nunca se cansan de cantar.

Creo que esta asignatura nos va a ayudar no solo a conocer en profundidad lo que es la plástica y a nosotros mismos, sino todo lo que le rodea.